En estos días, nuestra universidad atraviesa un proceso de renovación de autoridades en todos sus niveles. Este proceso no es un simple recambio de personas sino un punto de inflexión para nuestra vida universitaria y una buena oportunidad para replantear entre todos los actores universitarios, en conjunto con la sociedad toda, el rumbo que tomará durante los próximos cuatro años.
Los militantes del MNR apostamos fuertemente a transformar nuestra universidad, como una manera de aportar al cambio social que nuestra Nación debe necesariamente encarar. Este es el objetivo último que nos guía en cada una de las acciones que realizamos a lo largo de nuestra historia a nivel nacional y regional, y en cada espacio que ocupamos dentro de la universidad. Somos un movimiento que perdura más allá de las personas que lo componen y que busca aunar las voluntades de estudiantes, docentes, graduados y no docentes para profundizar su capacidad transformadora.
La UNL ha sido concebida a la luz de los ideales reformistas; así, tiene el deber de considerarlos como un punto de partida para cada política a tomar y no tan solo como un hecho histórico lejano que se nos trae a la memoria cada 15 de junio. Es también por esto que tiene la responsabilidad de reformular esos principios según el contexto y las necesidades que vive nuestra sociedad, de acuerdo a las discusiones que nos demos en el seno de la comunidad universitaria en base a aquellas necesidades.
La universidad nacional que tuvo su esplendor máximo en la década del ´60, donde el vínculo entre docentes, estudiantes y la sociedad era mucho más estrecho; donde la ciencia y la técnica eran herramientas al servicio de la resolución de problemas sociales y productivos; donde la transmisión de los conocimientos se realizaba de manera crítica; ha ido perdiendo paulatinamente hasta nuestros días aquellos motivos que le dieron su razón de ser.
Es evidente que los objetivos de nuestra universidad han cambiado. Actualmente, el pensamiento y la reflexión se redujeron drásticamente a la aplicación acrítica de la técnica, al logro de la eficiencia y a la realización de la ganancia empresarial y/o corporativa. Todo esto no es más que el resultado de las transformaciones que ha sufrido la sociedad tendiendo a un pensamiento individualista extremo, primando los valores asociados a obtener un beneficio personal por sobre el progreso colectivo.
Es entonces que nos preguntamos ¿cuáles deberían ser los objetivos que debe perseguir actualmente nuestra universidad?
Desde el MNR creemos que el principal objetivo debe ser el reencuentro de la Universidad pública con la sociedad, trabajando juntos en un proceso de reflexión y desarrollo del conocimiento técnico y científico, orientado a la resolución de sus problemas más urgentes.
Frente al debate que trae aparejado la renovación de autoridades, y por ende del Proyecto de Universidad para los próximos cuatro años, entendemos que la UNL precisa atender los siguientes temas, en el marco de un diálogo amplio y del fortalecimiento de los espacios participativos, donde sean jerarquizadas las voces de todos los claustros:
1. Desarrollar nuevas políticas de bienestar estudiantil e intensificar las existentes, de manera de poder contar con herramientas que atiendan la problemática de la alimentación de toda la comunidad universitaria, así como también de sus cargas de familia, priorizando para esto a los miembros que presenten una condición socioeconómica desfavorable.
2. Incrementar la representatividad estudiantil en los órganos de gobierno, permitiendo contar en el HCS y en la Asamblea Universitaria, con una participación sobre el total de miembros equivalente al que hoy se tiene en los Consejos Directivos.
3. Trabajar sobre la problemática asociada al ingreso y contención, generando políticas de inclusión articuladas; poniendo en discusión el actual sistema de ingreso, los dispositivos institucionales con que cuentan las unidades académicas y la UNL para este fin, y la articulación con el nivel medio.
4. Desarrollar y mejorar los mecanismos para que la comunidad logre conocer la realidad económica y financiera de la institución, así como un detalle de sus gastos e ingresos; e implementar instancias participativas para permitir que la comunidad académica se comprometa con estas temáticas.
5. Crear espacios de discusión en donde la Universidad, de cara al proceso de modificación de sus estatutos, pueda desarrollar vínculos entre toda la comunidad académica junto con la sociedad, de manera de generar un diálogo que permita la reflexión en conjunto acerca de la política académica, perfil de los graduados, líneas de investigación, fundamentos sociales de la producción y difusión de conocimiento en la UNL.
6. Refortalecer la planta docente de la Universidad, procurando una mayor publicidad de las convocatorias, y mejorando el proceso de selección de todo aspirante.
Estas son las preocupaciones que nos convocan y que nos motivan a imaginar posibles caminos de acción para su resolución, que deben, necesariamente, estar presentes en el debate por el destino de nuestra Universidad para los próximos cuatro años, más allá de nombres y candidatos.
Así sobre la base del respeto a las diferencias y la búsqueda de los puntos de encuentro que potencien todas las voluntades, creemos que la entrega de una parte de la vida individual permitirá alcanzar la grandeza de la vida colectiva.
Estamos dispuestos a ser participantes activos en este proceso, para confrontar visiones y para estar un paso más cerca del proyecto de universidad que perseguimos desde hace 50 años.
Por todo lo anterior te invitamos a que vos también te sientas parte y te sumes a este proyecto, que nos ayudes a enriquecer estas reflexiones y fundamentalmente a trabajar para revertirlas, porque el destino es siempre colectivo y nuestra Universidad necesita del trabajo de todos nosotros para revertir sus problemáticas más acuciantes.
Es el momento de comprometerse y poner en debate la situación que vivimos, este es el paso necesario, para que la realidad pueda ser transformada y podamos sentar las bases de una Universidad finalmente democrática, finalmente emancipatoria.
TE INVITAMOS A QUE PARTICIPES DE LA ASAMBLEA UNIVERSITARIA DONDE SE ELEGIRÁ AL PRÓXIMO RECTOR Y VICE RECTOR DE LA UNL, ESTE LUNES 23 DE NOVIEMBRE, A LAS 16:00HS EN RECTORADO.
Los militantes del MNR apostamos fuertemente a transformar nuestra universidad, como una manera de aportar al cambio social que nuestra Nación debe necesariamente encarar. Este es el objetivo último que nos guía en cada una de las acciones que realizamos a lo largo de nuestra historia a nivel nacional y regional, y en cada espacio que ocupamos dentro de la universidad. Somos un movimiento que perdura más allá de las personas que lo componen y que busca aunar las voluntades de estudiantes, docentes, graduados y no docentes para profundizar su capacidad transformadora.
La UNL ha sido concebida a la luz de los ideales reformistas; así, tiene el deber de considerarlos como un punto de partida para cada política a tomar y no tan solo como un hecho histórico lejano que se nos trae a la memoria cada 15 de junio. Es también por esto que tiene la responsabilidad de reformular esos principios según el contexto y las necesidades que vive nuestra sociedad, de acuerdo a las discusiones que nos demos en el seno de la comunidad universitaria en base a aquellas necesidades.
La universidad nacional que tuvo su esplendor máximo en la década del ´60, donde el vínculo entre docentes, estudiantes y la sociedad era mucho más estrecho; donde la ciencia y la técnica eran herramientas al servicio de la resolución de problemas sociales y productivos; donde la transmisión de los conocimientos se realizaba de manera crítica; ha ido perdiendo paulatinamente hasta nuestros días aquellos motivos que le dieron su razón de ser.
Es evidente que los objetivos de nuestra universidad han cambiado. Actualmente, el pensamiento y la reflexión se redujeron drásticamente a la aplicación acrítica de la técnica, al logro de la eficiencia y a la realización de la ganancia empresarial y/o corporativa. Todo esto no es más que el resultado de las transformaciones que ha sufrido la sociedad tendiendo a un pensamiento individualista extremo, primando los valores asociados a obtener un beneficio personal por sobre el progreso colectivo.
Es entonces que nos preguntamos ¿cuáles deberían ser los objetivos que debe perseguir actualmente nuestra universidad?
Desde el MNR creemos que el principal objetivo debe ser el reencuentro de la Universidad pública con la sociedad, trabajando juntos en un proceso de reflexión y desarrollo del conocimiento técnico y científico, orientado a la resolución de sus problemas más urgentes.
Frente al debate que trae aparejado la renovación de autoridades, y por ende del Proyecto de Universidad para los próximos cuatro años, entendemos que la UNL precisa atender los siguientes temas, en el marco de un diálogo amplio y del fortalecimiento de los espacios participativos, donde sean jerarquizadas las voces de todos los claustros:
1. Desarrollar nuevas políticas de bienestar estudiantil e intensificar las existentes, de manera de poder contar con herramientas que atiendan la problemática de la alimentación de toda la comunidad universitaria, así como también de sus cargas de familia, priorizando para esto a los miembros que presenten una condición socioeconómica desfavorable.
2. Incrementar la representatividad estudiantil en los órganos de gobierno, permitiendo contar en el HCS y en la Asamblea Universitaria, con una participación sobre el total de miembros equivalente al que hoy se tiene en los Consejos Directivos.
3. Trabajar sobre la problemática asociada al ingreso y contención, generando políticas de inclusión articuladas; poniendo en discusión el actual sistema de ingreso, los dispositivos institucionales con que cuentan las unidades académicas y la UNL para este fin, y la articulación con el nivel medio.
4. Desarrollar y mejorar los mecanismos para que la comunidad logre conocer la realidad económica y financiera de la institución, así como un detalle de sus gastos e ingresos; e implementar instancias participativas para permitir que la comunidad académica se comprometa con estas temáticas.
5. Crear espacios de discusión en donde la Universidad, de cara al proceso de modificación de sus estatutos, pueda desarrollar vínculos entre toda la comunidad académica junto con la sociedad, de manera de generar un diálogo que permita la reflexión en conjunto acerca de la política académica, perfil de los graduados, líneas de investigación, fundamentos sociales de la producción y difusión de conocimiento en la UNL.
6. Refortalecer la planta docente de la Universidad, procurando una mayor publicidad de las convocatorias, y mejorando el proceso de selección de todo aspirante.
Estas son las preocupaciones que nos convocan y que nos motivan a imaginar posibles caminos de acción para su resolución, que deben, necesariamente, estar presentes en el debate por el destino de nuestra Universidad para los próximos cuatro años, más allá de nombres y candidatos.
Así sobre la base del respeto a las diferencias y la búsqueda de los puntos de encuentro que potencien todas las voluntades, creemos que la entrega de una parte de la vida individual permitirá alcanzar la grandeza de la vida colectiva.
Estamos dispuestos a ser participantes activos en este proceso, para confrontar visiones y para estar un paso más cerca del proyecto de universidad que perseguimos desde hace 50 años.
Por todo lo anterior te invitamos a que vos también te sientas parte y te sumes a este proyecto, que nos ayudes a enriquecer estas reflexiones y fundamentalmente a trabajar para revertirlas, porque el destino es siempre colectivo y nuestra Universidad necesita del trabajo de todos nosotros para revertir sus problemáticas más acuciantes.
Es el momento de comprometerse y poner en debate la situación que vivimos, este es el paso necesario, para que la realidad pueda ser transformada y podamos sentar las bases de una Universidad finalmente democrática, finalmente emancipatoria.
TE INVITAMOS A QUE PARTICIPES DE LA ASAMBLEA UNIVERSITARIA DONDE SE ELEGIRÁ AL PRÓXIMO RECTOR Y VICE RECTOR DE LA UNL, ESTE LUNES 23 DE NOVIEMBRE, A LAS 16:00HS EN RECTORADO.
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